Problemas del Ford S-Max
- Problemas del motor con el turbocompresor: pueden aparecer entre 150 y 200.000 km, sobre todo en los motores 2.0 TDCi y 2.2 TDCi.
- Problemas de transmisión con la caja de cambios Powershift: suelen aparecer entre 50 y 100.000 km, sobre todo en cambios de marcha bruscos.
- Problemas con la cadena de distribución y la correa de distribución: pueden producirse entre los 100 y los 150.000 km, sobre todo en los motores de 1,6 y 2,0 litros.
- Problemas electrónicos con la batería y el mazo de cables: pueden aparecer a partir de los 70-90.000 km, a menudo debido a la oxidación de los contactos y a la humedad.
Ford S-Max: problemas del motor relacionados con el turbocompresor
El problema del motor del Ford S-Max, sobre todo en las variantes diésel como el 2.0 TDCi y el 2.2 TDCi, suele estar relacionado con el turbocompresor. Estas complicaciones suelen aparecer después de 150-200.000 km. Los síntomas son una pérdida de potencia, un aumento del consumo de aceite y, en algunos casos, el fallo completo del turbocompresor. El turbocompresor puede resultar dañado por la mala calidad del gasóleo o por el desgaste de componentes como el eje y el cojinete del turbocompresor.
Para solucionar este problema, es importante realizar cambios de aceite regulares y utilizar aceites de calidad. En caso de avería, generalmente hay que cambiar el turbocompresor. También es aconsejable revisar el filtro de partículas y las válvulas EGR, ya que también pueden contribuir a los problemas del turbocompresor.
Problemas de la caja de cambios del Ford S-Max: lo que dicen los conductores
La transmisión powershift del Ford S-Max a veces puede tener problemas para cambiar de marcha con suavidad o arrancar con retardo. Estas complicaciones suelen producirse entre los 50 y los 100.000 km. Las causas pueden ser un problema con el software de la ECU de la caja de cambios, un interruptor de presión defectuoso o un paquete de embrague desgastado.
Normalmente se pueden solucionar actualizando el software de la ECU de la caja de cambios. También es importante cambiar el aceite y los filtros de la caja de cambios siguiendo las instrucciones del fabricante. En algunos casos, también puede ser necesario sustituir la ECU o la mecatrónica. Es aconsejable cambiar regularmente el aceite de la caja de cambios y vigilar los signos de desgaste para evitar reparaciones costosas.
Ford S-Max: problemas con la cadena de distribución y la correa de distribución
La cadena de distribución y la correa de distribución de los motores Ford S-Max, sobre todo de las variantes de 1,6 y 2,0 litros, pueden estirarse o romperse. Estas complicaciones suelen producirse entre los 100 y los 150.000 km. Los síntomas incluyen un ruido de traqueteo al arrancar en frío o un fallo repentino de la cadena de distribución, que puede provocar graves daños en el motor.
La sustitución preventiva de la cadena de distribución y el sistema tensor en torno a los 100.000 km puede evitar costosos daños derivados. Los cambios regulares de aceite también son importantes para alargar la vida de los componentes. Es una buena idea estar atento a los signos de desgaste, como ruidos o vibraciones inusuales, y tomar medidas a tiempo.
Problemas con la batería electrónica del Ford S-Max
Los problemas electrónicos de tu Ford S-Max, sobre todo con la batería y el mazo de cables, pueden aparecer después de 70-90.000 km. Estos problemas suelen deberse a la oxidación de los contactos y a la humedad. Los síntomas son descarga rápida de la batería, mal funcionamiento del limpiaparabrisas, del sistema de infoentretenimiento y de otros componentes eléctricos.
Para solucionar estos problemas, es importante limpiar y revisar los contactos con regularidad. Actualizar el software del sistema de infoentretenimiento puede solucionar muchos de estos problemas. También puede ser necesario comprobar y sustituir el mazo de cables y la batería. Es aconsejable estar atento a los signos de humedad y corrosión y actuar a tiempo para evitar daños mayores.
Puntos débiles del Ford S-Max: interior y carrocería
El interior del Ford S-Max puede desarrollar puntos débiles con el tiempo, sobre todo en los cojines de los asientos y la consola central. Los cojines de los asientos pueden desgarrarse o abombarse, y la consola central puede aflojarse o quedar defectuosa. Estos problemas suelen aparecer al cabo de 5 a 7 años, sobre todo si el vehículo se ha utilizado de forma intensiva.
Para solucionar estos problemas, es aconsejable limpiar y mantener el interior con regularidad. Las piezas defectuosas deben sustituirse para garantizar el confort y la seguridad del vehículo. También es importante estar atento a los signos de desgaste y tomar medidas a tiempo.
Ford S-Max: problemas de dirección y frenado
En el Ford S-Max pueden producirse problemas de dirección y frenado, sobre todo tras un uso prolongado. La dirección puede producir un "traqueteo" o "chirrido" a baja velocidad, a menudo debido a un fallo de la caja de dirección o de la bomba de control de potencia. Los frenos pueden desgastarse prematuramente, sobre todo los discos y pastillas de freno traseros.
Para solucionar estos problemas, es importante revisar y mantener regularmente la dirección y los frenos. Puede ser necesario sustituir las piezas defectuosas y ajustar la dirección. Es una buena idea estar atento a los signos de desgaste y tomar medidas a tiempo para garantizar la seguridad de tu vehículo.
Ford S-Max: problemas con el aire acondicionado y el sistema de infoentretenimiento
Pueden surgir problemas con el aire acondicionado y el sistema de infoentretenimiento del Ford S-Max, sobre todo tras un uso prolongado. El aire acondicionado puede tener fugas o el compresor puede fallar, provocando averías. El sistema de infoentretenimiento puede sufrir bloqueos, fallos de funcionamiento o errores al actualizar el software.
Para resolver estos problemas, es importante revisar y mantener regularmente el aire acondicionado y el sistema de infoentretenimiento. La actualización del software del sistema de infoentretenimiento puede resolver muchos de estos errores. También puede ser necesario revisar y sustituir piezas defectuosas, como el compresor del aire acondicionado o el equipo de infoentretenimiento.
Otros fallos comunes del Ford S-Max
Basándonos en las experiencias de los conductores del Ford S-Max, te presentamos un resumen de posibles puntos débiles adicionales:
- Fugas del radiador de agua: suelen aparecer a partir de los 80-100.000 km, sobre todo en los modelos más antiguos.
- Fallos en el cierre centralizado: pueden aparecer a partir de los 50-70.000 km, a menudo debido a cierres de puertas o cajas de control defectuosos.
- Problemas del turbocompresor en los motores de gasolina: suelen aparecer después de 100-120.000 km.
- Sondas lambda defectuosas: pueden provocar complicaciones a partir de los 60-80.000 km, sobre todo en los motores de gasolina.
- Problemas del aire acondicionado: a veces aparecen a partir de los 40-60.000 km, a menudo debido a fugas o fallos del compresor.
- Fallos en los elevalunas eléctricos: suelen aparecer después de 70-90.000 km, sobre todo en las puertas traseras
.
- Problemas de la dirección asistida eléctrica: pueden aparecer después de 70-90.000 km, a menudo por fallos en los sensores.
- Problemas con el portón trasero y el portón trasero eléctrico: suelen aparecer después de 50-70.000 km, sobre todo en caso de uso intensivo.
- Problemas con el techo panorámico: pueden deberse a fugas o a mecanismos defectuosos, a menudo después de 5-7 años.
Conclusión
El Ford S-Max es un vehículo versátil y de altas prestaciones, pero como cualquier otro, tiene sus puntos débiles específicos. La vida útil y la fiabilidad del vehículo pueden mejorarse considerablemente con un mantenimiento e inspección regulares, y actuando a tiempo cuando surjan problemas. Es importante conocer los problemas y puntos débiles específicos del Ford S-Max y tomar las medidas adecuadas para garantizar un uso prolongado y sin problemas del vehículo.