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Skoda Fabia: problemas de cierre centralizado, fallo de aire acondicionado y otras averías frecuentes
El Skoda Fabia es un coche urbano bastante fiable y compacto que ofrece buenas prestaciones, aunque, también presenta fallos. A continuación te mostramos las averías frecuentes Skoda Fabia para ayudarte a elegir vehículo.
Principales fallos en Skoda Fabia
Entre las averías más frecuentes de este modelo destacan los fallos relacionados con el sistema eléctrico, como el Skoda Fabia fallo cierre centralizado. Si detectas alguno de los siguientes problemas, ¡ponte manos a la obra o acude a un taller mecánico lo antes posible!
Problemas eléctricos Skoda Fabia
- Defectos en el alternador. Es un problema crítico, puede afectar a todos los elementos eléctricos del coche y a la carga de Skoda Fabia batería aumentando el riesgo de accidente.
- Skoda Fabia fallo EPC. Relacionado con el control del motor. La luz testigo te avisará del fallo.
- Problema con el testigo de las luces. Si se produce algún fallo control electrónico motor del Skoda Fabia, se encenderá la luz de control del motor y de la dirección. Estos problemas suelen deberse a sensores defectuosos que puedes cambiar.
- Problemas cierre centralizado Skoda Fabia. Ocurre con bastante frecuencia y puede deberse a un defecto del cableado. Primero, asegúrate de que el mando tenga pilas y, si es así, el problema podría estar en un fusible averiado. Entonces, ¿cómo arreglar cierre centralizado Skoda Fabia? Cambiando el fusible por uno nuevo.
- Fallos en el limpiaparabrisas trasero. Puede dejar de funcionar y hacer bastante ruido debido a que su motor se quema con rapidez; habrá que cambiarlo.
- Errores en los elevalunas eléctricos. Quizás se deba a una rotura en el cableado o a una avería en el motor del elevalunas. Si se confirma, cámbialo.
- Fallo aire acondicionado Skoda Fabia. Si notas alguna anomalía relacionada, es posible solucionarla revisando el compresor aire acondicionado del Skoda Fabia.
Skoda Fabia problemas mecánicos
Son diversos los problemas Skoda Fabia gasolina y diésel que se han reportado desde que este modelo pequeño pero ágil comenzó a distribuirse. Entre los más habituales podemos enumerar los siguientes:
- Suspensión defectuosa. Es demasiado rígida y acaba dando problemas.
- Problemas caja de cambios DSG. Presenta dificultades para cambiar de marcha, por lo que, muy probablemente, tendrás que cambiar la caja por una nueva.
- Fallo en la bomba de combustible. Suele fallar con el uso, así que si notas una pérdida de potencia, bajo ralentí o consumo de combustible, o ruidos en el depósito, cámbiala.
- Fuga de agua de la bomba del limpiaparabrisas.
- Excesivo consumo de aceite. Este problema no tiene una solución definitiva, porque este modelo suele consumir más aceite que los demás.
- Defectos ejes de transmisión. Si te cuesta girar o se escucha un ruido en la parte delantera del vehículo, puede ser necesario sustituir el eje de la transmisión.
- Problemas con el sistema de encendido. Cuando esto ocurre, cada vez te costará más encender el coche. Por suerte, puedes acudir a un taller especializado para que sustituyan las piezas averiadas con los recambios del Skoda Fabia correspondientes.
- Fallo dirección asistida Skoda Fabia. Algunos conductores se han quejado de que el volante se queda duro durante unos segundos y se enciende la luz de la dirección.
- Fugas en la junta del cárter de aceite. Algunos síntomas de ello son unos niveles de aceite bajos, olor a quemado y manchas de aceite.
El mal funcionamiento del sensor EGR, fugas de aceite en la junta de la culata, averías en los inyectores de combustible o fallos en la suspensión son otros fallos. Pero, el fallo del Skoda Fabia cierre centralizado es muy común. Si no funciona el cierre centralizado del Skoda Fabia, hay que desmontar la puerta entera.
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